Congelar carne es una práctica bastante habitual, y una forma estupenda de evitar tener que comprar a diario. Aunque es muy importante hacerlo del modo adecuado, al igual que el proceso inverso de descongelar carne.
Si se congela o descongela de manera incorrecta, gran parte de sus propiedades se pierden. Además de que puede ser perjudicial para la salud. Por eso, vamos a hablar sobre la forma y los pasos que tienes que seguir para seguir disfrutando de tus carnes preferidas.

Cómo congelar la carne
Las claves para congelar carne con seguridad son las siguientes:
- Lo primero que tienes que hacer es elegir una carne fresca y de buena calidad. Así podrás conseguir los mejores resultados. Si las ha comprado con esta idea, en cuanto llegue a casa ponla a congelar de inmediato.
- Ten en cuenta que la grasa es la parte que menos aguanta, y se estropea con mayor facilidad que el resto. Para congelar carne elige mejor piezas magras, que no tengas trozos de grasa notables. Esto no significa que no puedas congelar carnes grasas, aunque deberás consumirlas en poco tiempo.
- Para facilitar el proceso de congelación, lo ideal es cortar al carne en raciones de unos 250 gramos o menos. Así, el frío tardará menos en hacer efecto.
- No pongas los trozos juntos en la misma bolsa, salvo que los vayas a descongelar a la vez. En lugar de eso, envuelve cada porción con film transparente asegurándote de que está bien protegida. El hielo directo puede “quemar” las fibras, haciendo que la carne pierda propiedades.
- Si estás pensando en volver a congelar carne que has sacado del congelador, olvídalo. No puedes congelar carne descongelada con anterioridad, a no ser que la cocines a alta temperatura para que el calor acabe con los gérmenes.
- Para congelar carne cocinada, espera a que se haya enfriado por completo antes de proceder.
¿Cuánto puede durar la carne congelada?
Depende del tipo de congelador que tengas en casa, y del corte que hayas elegido para ello. Lo mejor es hacerlo en un congelador de 4 estrellas, que alcanza temperaturas de -24º, aunque uno de 3 (-18º), también puede servir.
- Si se trata de carne magra, como filetes o estofado, puede llegar a aguantar hasta 12 meses en perfectas condiciones.
- Los cortes más grasos, como las chuletas, duran hasta 6 meses congelados. Si se trata de embutidos como el chorizo, no dejes que pase más de 1 mes.
- La carne picada es mejor que no la congeles, salvo que tengas la seguridad de que es muy fresca. En este caso, 3 o 4 meses es lo que podrás guardarla en el congelador.

Cómo poner a descongelar la carne
Antes de ponerte a descongelar carne rápido, es muy importante que sepas que necesita su tiempo, y que debe hacerse de la forma adecuada para que puedas disfrutar de sus propiedades.
- La mejor manera de descongelar la carne es ponerla en el frigorífico la noche anterior. Es el método que tarda más tiempo, pero también es el único con el que conservarás la textura y el sabor natural de la carne.
- Descongelar carne a temperatura ambiente no es una buena idea. Mucho menos expuesta al calor, como un día de verano o poniéndola al lado de un radiador o una estufa.
- Si vas a descongelar carne picada, asegúrate de que la vas a cocinar de inmediato. La carne congelada se deteriora con más rapidez que la fresca, y si está picada todavía más. El resto de carnes tampoco deberían esperar mucho tiempo para consumirlas.
- Si se trata de carne cocinada con anterioridad, como puede ser un estofado o una carne en salsa, la mejor manera es en el microondas Usa el programa de descongelación y luego calienta el plato del modo habitual.
- También puedes descongelar platos de carne en una cazuela a fuego lento. Siempre en el momento en el que te la vayas a comer.
En todo caso, la carne descongelada debe consumirse lo antes posible, y lo mejor es prever cuándo la vas a necesitar para evitar las prisas.
Sigue estas pautas para congelar y descongelar la carne, y siempre tendrás la seguridad de que mantendrás sus propiedades nutricionales, textura y sabor.