La gastronomía jiennense se nutre, desde tiempos inmemoriales, de una situación privilegiada; bañada por el río Guadalquivir y rodeada por los parques naturales de Sierra Morena y Sierra de Cazorla, Segura y las Villas, ha sabido captar a la perfección los sabores que la naturaleza le proporciona.
Carnes, especias de monte, la tradición de los pueblos es la base de una cocina rica en producto que se traduce en elaboraciones únicas que pasean al nombre de nuestra provincia por el mundo, hoy os hablamos de una de ellas: el lomo en orza.
Cuando hablamos de Jaén el lomo en orza sale a relucir como el plato estrella, una forma fácil y de resultado delicioso para conservar la carne.
El tiempo para elaborar esta sencilla receta es el secreto para obtener un producto tierno, jugoso y con durabilidad, cocciones lentas en manteca de cerdo aderezando la carne con especias y hierbas con las que estamos de sobra familiarizados: laurel, ajo, tomillo fresco, canela, clavo, pimienta…
Tras horas a fuego muy lento, la carne estará lista para pasar a la orza, un recipiente de barro donde poco a poco irá enfriándose, la grasa comenzará a cuajarse y quedará totalmente solidificada, este sello natural mantendrá el lomo protegido y dispuesto para guardar aguantando en perfecto estado durante al menos 4 meses.
Como resultado, un guiso de aromas campestres que transmite la tradición culinaria y el buen hacer de nuestros ancestros.
En Artemonte acogemos la herencia recibida y elaboramos nuestra orza de cerdo a la antigua usanza para ofrecer al público un producto terminado, con toda la esencia y sabor de nuestra tierra.
Respiramos Jaén y os transmitimos ese sentimiento como mejor sabemos hacerlo, ¡DEGUSTÁNDOLO!