Las dietas son más que una herramienta para poder eliminar aquello que sobra, consiguiendo mejorar la salud del cuerpo y definiendo la silueta; también son una forma de aprender a alimentarse de forma correcta, haciendo de ello un estilo de vida a seguir.
Al hacer una dieta es importante adquirir nuevos hábitos de alimentación que permitan mantener el peso, evitando así subidas y bajadas excesivas que pueden provocar cambios bruscos en el cuerpo. También que pueda suplir las necesidades concretas de cada persona.
La dieta paleo es una opción que muchos usan para poder llevar una mejor planificación de las diferentes comidas.
Qué es la dieta paleo
La dieta paleo consiste en seguir el tipo de alimentación que llevaban los primeros humanos durante la época del paleolítico. De ahí que a esta dieta paleo también se la conozca como paleolítica.
En aquella época la alimentación se basaba en todo aquello que se pudiera conseguir gracias a la caza, la pesca y la recolección de semillas y otros alimentos que la tierra ofrezca.
Con la aparición de la agricultura y la ramaderia se introdujo en la dieta otros alimentos, como los lácteos. Se creyó que estos productos eran necesario tomarlos, pero en realidad solo contribuyen a la proliferación de enfermedades, como la diabetes o la obesidad.
Una hipótesis asegura que el tipo de alimentación moderna no está hecho para que el cuerpo humano pueda asimilarlo de forma correcta.
Con la dieta paleo se quiere volver al tipo de alimentación anterior al momento de la entrada de los cereales, lácteos y legumbres que, según la hipótesis antes mencionada, hace que al cuerpo le sea difícil adaptarse y aparezcan síntomas de mala salud.
Cómo funciona la dieta paleo
La dieta paleolítica consiste en la ingesta de alimentos considerados saludables, como fruta, verdura, pescado y carne. Con ello se busca eliminar de la dieta, o solo reduciendo el consumo, de alimentos considerados menos saludables y que estaban fuera de la alimentación del hombre paleolítico.
El objetivo de la misma es que cada persona pueda tener una alimentación sana y equilibrada en base a las necesidades que presente de manera individual.
Alimentos que están dentro de la dieta paleolítica
Lo más importante en la dieta paleolítica es poder llenar la nevera de alimentos que resulten sanos y nutritivos.
Hay que eliminar el consumo excesivo de grasa con la ayuda de carnes magras de animales que hayan sido criados en pastos corriendo libres, como jabalí y ciervo.
La ingesta de verduras es muy necesaria, sobre todo evitando que hayan sido tratadas con pesticidas. Lo mismo puede decirse de la fruta, productos elementales en toda dieta sana.
Aunque se deba evitar el consumo de grasa todo lo posible, también es necesario la ingesta de las conocidas como grasas saludables. Estas se pueden conseguir mediante los frutos secos, el aceite de oliva y el pescado azul, que contiene Omega 3.
Beneficios de la dieta paleo
Muchas personas que han seguido un plan de alimentación siguiendo la dieta paleo se han encontrado que, al poco tiempo, ha mejorado su salud.
Esta dieta aporta energía, reduce la probabilidad de sufrir alergia y es ideal para deportistas, ya que les permite soportar los entrenamientos más duros. También regula el nivel de azúcar en la sangre, ayuda a mejorar la calidad del sueño, es saciante y permite quemar grasas, ideal para perder kilos.
Dentro de la dieta paleolítica se evita el consumo de granos, siendo perfecta para personas que tienen enfermedades que ya son crónicas o autoinmunes.
Estas enfermedades vienen provocadas, entre otras cosas, por una mala alimentación. La dieta paleo intenta dejar de lado ese tipo de alimentos que hacen daño, provocan inflamación e irritación, cambiandolos por una alimentación sana y equilibrada.
A esto podemos llamarlo dieta paleo autoinmune.
Dieta paleo: una dieta individualizada
Para seguir una dieta paleo, al igual que ocurre con el resto de dietas, es importante contar con la ayuda de un especialista. Este debe saber cómo aplicar una dieta paleo semanal adecuada a cada persona.
Antes de comenzar esta dieta es bueno realizar exámenes médicos y ponerse en manos de profesionales, para adaptar la dieta a cada persona. Y es que cada cuerpo tiene sus necesidades específicas que hay cubrir.