La carne de ciervo tiene muchas características nutricionales, además de ser una carne muy sabrosa pero con menos calorías, colesterol y grasas que otras carnes rojas. Además de ser una carne que te permite crear una amplia gama de platos y fusionar ingredientes sin que pierda ese sabor intenso.
Hoy te traemos un plato sencillo pero con un alto valor nutritivo y que sorprenderá a tus invitados por su tonalidad y sabor.
- Duración: 30 minutos
- Dificultad: fácil
- Nº de Personas: 4
Preparamos los ingredientes para la crema de guisantes:
- 200 g guisantes congelados
- 1 cebolla grande
- 1 diente de ajo
- 200 ml caldo de verduras
- 15 g de mantequilla
- Aceite de Oliva
- Sal y Pimienta negra
- Tosta de Cecina de Ciervo
- Pan de molde
- Cecina de Ciervo Artemonte
- Pera de Conferencia
- Fresa
- Brotes de canónigos
Es hora de cocinar
Primero preparamos una sartén con aceite de oliva y pochamos la cebolla y el ajo picado fino y salpimentamos.
Cuando veamos que la cebolla ya esté blanda, añadimos los guisantes y rehogamos durante cinco minutos. (Nota: Si utilizais guisantes congelados el color de la crema será más intenso, si utilizar guisantes naturales el color será más pardo.)
Rápidamente añadimos el caldo de verduras y lo dejamos cocer unos ocho minutos.
Una vez que esté cocido lo colocamos en un recipiente y lo pasamos por la batidora para triturar todo junto con la mantequilla hasta que consigamos una crema fina. (Nota del cocinero: Si vemos que nos queda espesa, el truco es añadir más caldo de verduras.)
Para preparar la tostada que acompaña a la crema de guisantes, preparamos una rebanada de pan de molde y la aplastamos con un rodillo hasta conseguir una lámina fina, recortamos los bordes y hacemos unas tiras de unos 2 cm de ancho y las tostamos.
A continuación pelamos la pera y hacemos cubitos de 1 cm de lado. El truco está en marcarla un poco en la sartén para que se caramelice. Hacemos lo mismo con la fresa pero sin caramelizarla.
Vamos ahora con el toque final y montamos en cada una de las tiras de pan 2 lonchas de ciervo, 3 cubitos de pera y fresa y 3 brotes de canónigos. Acompañamos estas tostadas con la crema de guisantes calientes servida en una copa y para acabar regamos todo con un chorrito de Aceite de Oliva Virgen.
Esta receta sencilla y ligera es ideal para abrir boca como entrante en tus cenas o comidas. Una receta donde la cecina de ciervo da el toque de sabor intenso para un plato con personalidad que dejará a tus comensales con ganas de más.