Recientemente ha sido fallado el Bocuse d’Or Europa 2016. Para aquellos que no lo conozcáis se trata del premio de gastronomía europeo más prestigioso de Europa y que este año se ha celebrado en Budapest.
El nombre de este concurso mundial creado en 1987 se debe al chef francés Paul Bocuse, considerado creador de la nouvelle cuisine, un estilo en el arte culinario donde cobra principal protagonismo la presentación de los platos primando su elegancia visual.
En total, 20 han sido los aspirantes entre los que se encontraba el representante de España, Juan Manuel Salgado, extremeño y jefe de cocina en el Restaurante Plassohla del Hotel Ohla de Barcelona y que se alzó ganador del Bocuse d’Or España 2015 celebrado en Valladolid el pasado mes de noviembre.
Dos son siempre los productos obligatorios con los que los aspirantes han de convencer a un selecto jurado elaborando los platos que los defenderán en estas Olimpiadas de la Gastronomía, con poco más de 5 horas para preparar y presentar sus creaciones.
Este año, los dos productos principales escogidos por la organización han sido el esturión con su caviar y el ciervo rojo.
Por desgracia no es habitual que la carne de monte sea la protagonista en concursos gastronómicos, por ello, que el prestigioso Bocuse d’Or Europa lo incluya como producto principal refleja el pausado pero constante ascenso que estas carnes empiezan a tener en el panorama culinario.
La carne de ciervo rojo es una carne muy saludable dado su bajo contenido en grasa y colesterol. Es fuente de hierro, fósforo, vitamina B y proteínas y a pesar de lo que está muy extendido, su sabor es exquisito, limpio y muy agradable al paladar. En definitiva una de las carnes más apreciadas en la alta cocina.
No queremos despedirnos sin felicitar al ganador del Bocuse d’Or Europa 2016, el cocinero Tamas Szell de Hungría junto a los dos compañeros por plata y bronce, Christopher William Davidsen de Noruega y Alexander Sjögren de Suecia respectivamente.
Aunque España nunca ha tenido suerte en este concurso y nuevamente nuestro representante no haya conseguido clasificarse para el próximo Bocuse d’Or mundial que se celebrará en Lyon (Francia) en enero de 2017, estamos convencidos de que vuelve con la sensación de haber puesto el 100% y haber vivido una experiencia muy enriquecedora.
Siempre hay que quedarse con la parte positiva y para nosotros, el protagonismo indiscutible de la carne de monte ha sido un bonito triunfo.
#Artemonte